Roma me dejó sin aliento. No lo digo sólo por una cuestión física, sino sobre todo por la magnitud histórica que allí se palpa a cada paso...
La Capilla Sixtina y el Vaticano, sus museos, la Basílica de San Pedro... toda la historia y las personas que por allí pasaron y dieron forma al catolicismo... la inmensidad de los edificios, el valor cultural de sus obras, te pasas admirando todo, con la cabeza hacia arriba, incapaz de poder asimilar la magnitud de lo que observas...
A nivel cívico los romanos desde sus inicios allá por el siglo III A.C. organizando al pueblo, las leyes, el senado, las formas de gobierno ... Pensar que la vía sacra del foro romano se paseaban Julio Cesar, Octavio, Marco Aurelio... y esto no fue ayer, ni en el 1.200, fue desde los orígenes del mundo occidental letrado... se trata, junto con los griegos, o quizá siguiendo un poco la línea comenzada por los ellos, de las primeras organizaciones sociales y culturales que se mantienen hasta nuestros días...El latín, el griego, las academias, el senado, las cloacas, las cúpulas como la del Panteon, los acueductos, los caminos...
Hay tanto escrito sobre Roma , tantas películas, tanto que hemos leído en el colegio, en la literatura, en todo tipo de expresión cultura... por eso cuando caminas por sus calles la sentís propia, no te sentís un extraño en las calles de Roma...
Miguel Ángel se perfila como el artista más completo y versátil de la época y me atrevería a decir que no hay otro como él... Desde la Capilla Sixtina, con el Juicio Final plagado de detalles y esos cuerpos perfectamente plasmados en sus movimientos, la tensión de sus músculos, la belleza de sus cuerpos y esos colores tan vívidos, blancos, naranjas, azules, verdes...
La Piedad y el Moisés que se pueden admirar como si fueran seres humanos congelados en el mármol blanco, suave y luminoso, logra emocionar con cada curva, las manos, las venas, la cadencia del cuerpo en la postura esculpida, el rostro de la virgen, tan dulce, sus ojos llenos de tristeza, una tristeza dulce e inocente como de niña... El Moisés impresiona por su inmensidad, su robusta consistencia, su cuerpo fuerte y otra vez admiro cada trazo de Miguel Ángel, perfecto en sus formas, en sus curvas... parece imposible que sus esculturas hayan sido logradas a mano, con piedra y cincel, son tan perfectas y reales que parecen seres humanos convertidos en mármol...
Las fuentes de Roma tienen una fuerza especial, sobre todo la de los 4 fiumi, y la fontana di trevi. Los cuerpos, las dimensiones, el agua, la escena en si misma, cada detalle hace un TODO impactante. Más allá del circuito romántico que atrae a los turistas a la Fontana di Trevi, la fuente por sí misma es llamativa, como una pared que se alza entre tres vías, o calles... (por eso su nombre)... y Neptuno con dos hombres más peleando con dos caballos surgen del agua con tanto realismo que pareciera que han quedado inmortalizados en ese instante y para siempre..
Roma es impresionante... me ha dejado sin habla...
Caminando por la avenida Via dei Fori Imperiali dejando a la izquierda el foro de Trajano y a la derecha el Foro Romano Imperial, se ve de fondo la silueta inconfundible del Coliseo, con sus 3 pisos de gradas y sus antiguas paredes decreciendo hacia la derecha, fiel reflejo del deterioro que ha sufrido en el tiempo. Ver el Coliseo es caer en la cuenta del lugar que se está visitando, sentir la emoción de pisar suelo romano, suelo antiguo, suelo histórico, de haber realizado un sueño...
Me queda por mencionar los riquísimos helados que tomamos de.. Giolitti, en la calle Vía degli Uffici del Vicario 40. Qué buenos!!
Una promesa eterna encadenada a la tercer farola del puente Cestio, unos ricos mojitos y un inigualable cóctel de fruta de la pasión a la orilla del río tevere, en la isola romana justo antes de curzar al Trastevere
Ese fin de semana en Roma fue inmejorable.... y así lo guardo en mi memoria
Para hospedarse... recomiendo el Stay Inn... impecable, nuevo, moderno, luminoso, es un pequeño hotel boutique en la calle Via del Corso, al lado de Piazza Spagna y de la Piazza del Popolo
Les dejo mis fotos:
Album I (hay fotos de la capilla sixtina, la piedad, el moises, algunas fuentes, etc, etc)
Album II (hay fotos del foro, el coliseo, las catacumbas, etc, etc)
(para los amigos del facebook ... ni se molesten... son las mismas fotos que allí colgué)
3 comentarios:
Admirable descripción de la ciudad y de tus sentimientos.
Te quiero mucho
Hola María:
he llegado hasta aquí por un comentario que hiciste en mi blog, Tecme y Puma. Me ha encantado leer la crónica de tu viaje a Roma. Yo terminé allí mi interrail por Italia. Y guardo muy buenos recuerdos. Me ha gustado rememorarlos de la mano de tu blog. Saludos. Usúe
podrias publicar cronicas de viajes en un diario!!! Es un desperdicio que la gente se pierda la magia de tus descripciones. Imperdible!!! te quiero bonita.
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